Una gran lección de respeto
Un día decidimos tener una mascota en casa, porque nos dimos cuenta de que no podiamos dejar que nuestros hijos no experimentaran la gran variedad de sentimientos y vivencias que ofrece tener un animal en casa: amor, responsabilidad, asombro, divertimento, etc. Asi, hace casi dos años, llegó el conejo Pecoso y unos meses después, nuestra periquita Wiki :)
Como podeis ver, se quieren y se respetan mutuamente desde sus diferentes características: ¿cabe mayor lección de respeto a aprender?
Ojalá siempre fueramos conscientes de cuánto tienen los animales para enseñarnos a los humanos... ;-)
1 comentarios:
Tú lo has dicho, LUNA: hay tantas ocasiones en las que, si nos fijaramos en determinados comportamientos de los animales, aprenderíamos mucho más que mucho...no cabe duda :)
20 de junio de 2011, 14:22Publicar un comentario